Si es un dolor permanente y que ha ido aumentando, esto no es normal y debe acudir al médico general para solicitar una imagen que permita descartar algún proceso inflamatorio en la zona. Si es un dolor que va y viene y su intensidad no ha cambiado o ha disminuido, puede deberse a cambios permanentes en el tejido por cicatrización y aunque es molesto, no tiene repercusiones en su salud.