Las cafeína presente en diferentes bebidas puede pasar a la leche materna y por ende al bebé que puede llegar a consumirla. Entre los diferentes efectos que esto puede causar incluye la irritabilidad (que se encuentre inquieto, que llore y no se pueda calmar), que no le permita conciliar el sueño, temblor, entre otras. Sin embargo esto depende tanto de la dosis (cantidad de cafeína) así como la tolerancia del bebé a la misma (puede no tener efectos secundarios así como podría presentarlos con menor cantidad).
Ten presente que la duración de la cafeína en el cuerpo puede ir desde 4 hasta 9 horas, por lo que de ser posible intenta buscar un horario en el que las tomas de pecho del bebé estén separadas del consumo de cafeína para de esta manera disminuir la cantidad que pudiese recibir.