EL aumento de flemas puede ser secundario a infecciones virales o incluso a alergias debido a diferentes contaminantes en su ambiente como humo, polvo, acaros, o pelos de animales. Le recomedaría evitar cualquier clase de alergenos y evitar tener contacto con estos contaminantes. Si persisten las flemas o se asocian a fiebre, dolor toracico o sangre en su esputo, debe consultar al medico.