Es posible que se trate de una infección en la piel. Este tipo de lesiones pueden aumentar de tamaño convirtiéndose posteriormente en abscesos que requieren drenaje y que pueden evolucionar a artritis séptica por la cercanía con la rodilla. Recomiendo que la lesión sea revisada para descartar la presencia de un cuerpo extraño en su interior, si es considerablemente grande deberías recibir tratamiento con antibióticos orales.