La ecografía es un método bastante fiable para diagnosticar un embarazo, pues se puede evidenciar el saco gestacional (saco de formación del embrión), pero éste hallazgo se observa aproximadamente entre la 4 y 5 semana de embarazo, por lo que usted debería realizarla pasadas mínimo 5 semanas después de la relación sexual.
Lo conveniente es que antes de hacerse una ecografía se realize una prueba de embarazo en sangre u orina, independientemente de que tenga quistes ováricos. LA prueba de orina debería hacerla pasados 7 días de retraso menstrual y la de sangre, podría hacerse 10 días tras la relación sexual.