A pesar que la dexametasona puede servir como desinflamatorio, por lo general son necesarias pautas terapéuticas adicionales para el manejo de este tipo de linfadenitis. Sigue las recomendaciones dadas por su médico y mantenla en seguimiento estricto para determinar su evolución. Si aparece fiebre, el ganglio sigue inflamandose o el dolor es intolerable debe acudir a urgencias.