Es importante que sepa que fiebre se considera desde 38.3°C, sin embargo como ha ascendido la temperatura, sino tiene ninguna contraindicación dada por el médico tratante, es recomendable aumentar la ingesta hídrica, ya sea con agua, jugos, o con suero de rehidratación oral como el pedialite.
En ocasiones usar medidas locales como paños mojados puede ayudar a controlar la temperatura.