La posibilidad de que tu bebé contraiga la infección aumenta a medida que tu embarazo avanza. Si te infectas con toxoplasmosis durante el primer trimestre, el riesgo de que tu bebé también se infecte es de aproximadamente el 15 por ciento.
Sin embargo, aunque el índice de transmisión de la infección es mayor en las últimas etapas del embarazo, la toxoplasmosis tiene más posibilidades de ser más grave para tu bebé, si este se infecta durante los primeros meses del embarazo.
También existe un pequeño riesgo de infectar al bebé si contraes la infección unos pocos meses antes de quedar embarazada. Si sabes que has contraído la infección recientemente, es mejor que esperes algunos meses antes de intentar quedar embarazada. Cuando las pruebas de toxoplasmosis den negativas.