El infliximab (remicade), cuenta con reportes de su efectividad en el manejo de la enfermedad de Crohn en asociación con otros fármacos o en terapia exclusiva, con poca evidencia en su uso a largo plazo. Al igual que el Ustekinumab (Stelara) también reporta mejoría de los síntomas en el manejo de condiciones refractarias.
La elección de uno u otro depende de la condición clínica del paciente, disponibilidad del fármaco, así como experiencia de uso por parte del profesional encargado. Evite la automedicación y asista a control médico.