Las lesiones como furúnculos o abscesos son manejadas con calor local para favorecer su drenaje espontáneo o en algunos casos mediante drenaje directo de la lesión por incisión. Debe continuar la aplicación de calor local al menos 6 veces al día por 10 minutos para favorecer una mejoría, la cual no es inmediata.
Si la lesión crece, incrementa la inflamación o el dolor, o persiste asista a evaluación médica.