Los síntomas de sobredosis de amoxicilina corresponden a una intensificación de los efectos adversos del medicamento tales como: Dificultad para respirar, dolor de cabeza ante la presencia de luz, desmayos repentinos, dolor articular, fiebre, dolor estomacal severo y calambres con diarrea sanguinolenta, reacción alérgica severa (marcada por hinchazón súbita de labios, lengua, cara o garganta, manos, pies; dificultad para respirar o tragar, tos, dolor de garganta, enrojecimiento de la piel, picazón), hemorragias o moretones inusuales, tinte amarillento en la piel u ojos. Si alguno de estos efectos está ocurriendo debes acudir a tu médico de cabecera para que evalué la gravedad de la intoxicación y tratarla oportunamente.