Puede ser que estés incursando en un codo de tenista o golfista. En el que se inflaman los epicóndilos del codo ya sea por movimientos o esfuerzos repetitivos y generan un proceso inflamatorio a largo plazo. Si el dolor no mejora con antiinflamatorios, lo ideal es que acudas a un médico general para que optimice el manejo farmacológico y haga las maniobras pertinentes para evaluar si requiere o no otros manejos adicionales.