En la gran mayoría de niños, los dientes de leche se empiezan a caer entre los 6 y 7 años, el hecho de que en su hija haya iniciado a los 5 años, supone un pequeño adelanto en el cambio de dentición que se considera normal.
Es recomendable que su hija y todos los miembros de la familia estén en seguimiento por odontología.