Al comienzo del embarazo, es habitual que se presenten síntomas como las nauseas o "ascos", ello es determinado por una elevación pronunciada de las hormonas en el cuerpo y suele mejorar entre las semanas 12 y 25 de gestación, en algunas puede prolongarse más.
Se recomiendan las bebidas con gengibre para disminuir las nauseas.