La irritabilidad podría responder no solo a temas gastrointestinales sino a diferentes alteraciones inflamatorias o infecciosas. SI esta situación continua te recomiendo acudir al médico, preferiblemente pediatra, quien pueda a través de un examen físico determinar si existe alguna alteración. Si se presenta fiebre, vómitos o alteraciones asociadas tienes que acudir cuanto antes.