Técnicamente diría que es imposible ya que el acceso al aparato reproductor femenino es a través de la vagina, e internamente no hay posibilidad que los espermatozoides alcancen los óvulos por vía anal. Sin embargo, en la práctica no es raro que por la cercanía o vecinidad del ano con la región vaginal, se contamine o se traslade en algún momento durante o al final de la relación, así sea una mínima cantidad de espermatozoides al exterior de la región vaginal y puedan potencialmente producir un embarazo.
Se conocen casos donde han ocurrido embarazos por eyaculación en la región genital externa femenina sin necesidad de penetración. Así que todo depende de la protección usada, de las prácticas y hábitos particulares de la pareja, lo que dará mayor o menor posibilidad a que esto ocurra.