Una persona puede tener problemas metabólicos como alteración en los triglicéridos, colesterol o azúcar, sin tener sobrepeso u obesidad. Esto se debe a que las causas de estas enfermedades son variadas y se dan por una combinación de muchos factores: desde una alimentación poco saludable hasta herencia familiar. Los triglicéridos altos pueden predisponer a enfermedades del corazón, por lo cual deben tratarse con cambios en el estilo de vida, como evitar el sedentarismo, realizar actividad física y tener una dieta balanceada baja en grasas animales. Se prescriben medicamentos cuando los cambios en el estilo de vida no son suficientes para normalizar estos resultados.