El crecimiento de la barba y el pelo en general tiene un alto componente genético, estando directamente relacionado con tu ascendencia, raza y región, condicionada por ciertos factores ambientales como infecciones o mala alimentación. Estos factores hacen que los folículos sean mas o menos sensibles a la acción de la dihidrotestosterona sobre ellos, los hombres en general tienen los mismos niveles de esta hormona lo que varía es la sensibilidad a la misma. Esta sensibilidad es contraproducente a larga data ya que condiciona la aparición de calvicie.
La barba como muchas estructuras corporales que actualmente se podrían consideran inútiles se piensa es una expresión que puede estar vía de extinción de generación en generación ya que no parece contar con utilidad aparente en la actualidad como lo pudo haber hecho anteriormente para parecer mas grande y proteger la zona de lesiones o contusiones.