Aunque hay poca evidencia, se ha encontrado que algunos alimentos pueden influir en el mantenimiento de la coloración del pelo corporal: infusiones de té, cereales integrales que aportan altas cantidades de vitaminas del tipo B. La levadura de cerveza, las legumbres y los frutos secos también están entre otras opciones. El zinc y el cobre son otros minerales fundamentales para mantener el cabello en perfectas condiciones. Estos nutrientes aparecen en altas cantidades en alimentos como pescados y mariscos. Además se encuentran tratamientos que pueden ofrecerle en consulta con un dermatólogo o médico estético como mesoterapia.