El agua por sí sola no es causante de enfermedad, la humedad puede predisponer a lesiones por hongos si no hay un secado adecuado, la exposición a frío puede generar un impacto a nivel inmunológico y favorecer la actividad de ciertos virus y facilitar el desarrollo de infecciones en ciertos casos sin ser una causa directa, en algunos individuos puede facilitar la aparición de síntomas como rinitis alérgica.