Algo le está pasando: ¿hambre?, ¿frío?, ¿calor?, ¿dolores abdominales?, ¿mucho ruido?, ¿tensión en la gente que lo manipula?, ¿quemada la piel por la orina en la zona del pañal?, ¿dolor de oído?, etc. Por favor explore estas y otras posibilidades y llévelo al pediatra.