Si la afección es persistente es necesaria la realización de paraclínicos, como el coprológico. Es probable de que se trate de una infección gastrointestinal (gastroenteritis). Estas infecciones pueden ser causadas por bacterias, virus o parásitos y cada uno de estos agentes tiene un tratamiento determinado.
Si no ha presentado mejoría es probable que el tipo de antibiótico que está tomando no sea el indicado para la causa de su gastroenteritis. Debe acudir a su médico de cabecera. Si presenta fiebre, diarrea con sangre, imposibilidad para consumir alimentos y/o líquidos, dolor abdominal intenso y signos de deshidratación (como boca seca, ojos hundidos, piel seca y arrugada, falta de orina, orina amarilla y oscura, respiración rápida, latidos cardíacos rápidos, confusión, etc.) debe acudir inmediatamente al servicio de urgencias más cercano.
Mientras tenga síntomas evite consumir alimentos grasosos y lácteos.