Es relativamente frecuente que los niños de esa edad experimenten algunos problemas en la frecuencia de las deposiciones, sin embargo esto no necesariamente implica enfermedad.
Puede intentar introduciendo papillas de frutas como papaya e ir aumentando la cantidad de líquido. Si presenta dolor abdominal, vómito, fiebre o marcada irritabilidad asociada a la ausencia de deposiciones sería momento de llevarla al pediatra.