El codo puede inflamarse por diferentes causas: golpes, por ejemplo. En caso de que no haya tenido golpes puede ser una inflamación local por apoyar mucho la articulación, por una infección de la piel o la articulación o puede ser gota u otra enfermedad inflamatoria de la articulación propiamente dicha.
Para un diagnóstico certero es necesario que tanga una valoración médica presencial para poder dirigir el tratamiento.