El incremento del flujo vaginal podría asociarse a un proceso infeccioso. No obstante, de acuerdo a sus características y ausencia de síntomas no parece ser el caso.
El dolor del abdomen bajo puede tener distintos orígenes: procesos gastrointestinales, condiciones ginecológicas no necesariamente patológicas (cólicos o procesos infecciosos).
Si los síntomas persisten, asista a valoración médica.