El dolor generado por los cólicos despertó una respuesta parasimpática (una parte de los nervios del cuerpo) que generó a su vez el aumento del tránsito intestinal y seguramente hipotensión. La hipotensión explica la sudoración fría, el hormigueo en las manos y las molestias en la boca. Cuando suceda esto debe guardar reposo en cama y controlar el dolor con los medicamentos analgésicos que mejor funcionen en su caso.