Sí, puede empezar a desarrollar los síntomas del embarazo sin realmente estarlo: embarazo psicológico. Por lo que puede llegar a sentir cómo el abdomen va creciendo, los dolores de abdomen, en los senos, el dolor de cabeza, las náuseas y los antojos.
Para descartar un posible embarazo es necesario hacer la prueba idealmente en sangre.