El tener las orejas calientes no representa un signo de alarma si se descarta que en el momento se encuentra con fiebre. Las áreas de la nariz y las orejas están formadas principalmente por cartílago que puede adaptarse a diferentes climas y muchas veces al presentar frío aumenta su flujo sanguíneo y por consiguiente aumenta su temperatura.
Recomiendo descartar siempre la fiebre en estos casos antes de enfocar cualquier diagnóstico.