Puede ser normal si esas picadas se presentan cuando el bebé está succionando, puede ser secundario también a la producción de la leche por parte de la glándula. Lo que no es normal es que sean muy constantes o que estén asociadas a cambios inflamatorios de la piel del seno (como que se ponga roja, caliente o muy dura) en cuyo caso debería consultar al médico tratante inmediatamente.