Las necesidades de sueño varían de una persona a otra. Algunas necesitan pocas horas de sueño y son completamente funcionales y no experimentan cansancio, mientras que otras requieren más horas de lo usual.
Dentro de las estrategias que puede utilizar para mantener una vida más activa está realizar actividad física (mínimo 150 minutos de ejercicio a la semana) y tener una alimentación sana y balanceada consumiendo mínimo 5 a 6 porciones de frutas y verduras al día.
Si adicionalmente a los altos requerimientos de sueño usted experimenta presencia de dolor de cabeza constante, fatiga fácil al realizar alguna actividad, presencia de desánimo durante las horas que se encuentra despierto sería conveniente consultar al médico para hacer un chequeo general y descartar enfermedades que puedan explicar su cuadro.