Actualmente se considera que el papel de la carga genética es muy importante en el desarrollo de distintas patologías. Por ejemplo el hipotiroidismo autoinmune (no por deficiencia de yodo). Los triglicéridos elevados pueden encontrarse en asociación con patologías hereditarias, pero se encuentran igualmente ligados a desórdenes en la alimentación (consumo excesivo de calorías) que favorece el almacenamiento y consecuente aumento de los triglicéridos en el organismo.