Si todos los exámenes que le han realizado están normales, lo más seguro es que la pérdida de peso sea secundaria a la suspensión del consumo de grasas, tal vez asociado a episodios de estrés o aumento de la actividad física. Sin embargo es recomendable que si la última endoscopia fue hace más de 1 año, la realice nuevamente para hacer un control de la gastritis y descartar otras lesiones. En caso de que la pérdida de peso continúe rápidamente, consulte a su médico tratante.