Es un caso curioso. Acá lo que hay que hacer es examinar a la persona de pies a cabeza de forma general primero y ver si algo no está del todo normal en ese examen. Luego -si todo sale normal (en apariencia)- se puede tratar de investigar si es una aversión creada a los aparatos eléctricos o si realmente existe una relación causa - efecto.
El cuerpo humano puede conducir energía estática y cargarse de esa energía, eso es bien conocido. Algunas personas conducen esta carga eléctrica a otras al tocarlas -por ejemplo- y se producen chispas o incluso corrientazos leves en ambas personas. Eso podría explicar lo que la persona refiere de forma lógica y potencialmente es posible.