Si su hija es alérgica al polvo, pelo de animal, malos olores, puede que no sea recomendable tener un gato en la casa. Pero si por el contrario solo ha tenido un episodio de bronquiolitis pueden intentarlo, sin embargo, es preferible que tenga contacto con animales que no estén permanentemente en casa, con eso se adapta y el animal no corre el riesgo de ser abandonado más adelante.