La Epistaxis o sangrado nasal se asocia mayormente a la fragilidad capilar de la abundante irrigación de la nariz, a la resequedad, a la actividad física o a traumas previos en la mucosa, que facilitan la aparición de sangrados usualmente autolimitados. Si el sangrado persiste por más de 20 minutos o aumenta de forma considerable, es necesario asistir por urgencias.