Durante la gestación se pueden dar cambios que son considerados como fisiológicos, una disminución moderada de la presión arterial, la cual no se acompaña de síntomas como desmayos y otros, puede ser completamente normal y benigno y no tiene porqué afectar el desarrollo normal del feto en crecimiento, por lo general, mujeres en estado grávido manejan presiones bajas, más marcado en periodos avanzados de la gestación, donde el feto puede comprimir estructuras vasculares que llevan a que la presión arterial, generalmente disminuya, claro está, sin exceder los límites normales.