Es necesario hacer nuevas mediciones para confirmar la persistencia en la diferencia de las presiones arteriales entre ambos miembros superiores. Se pueden aceptar diferencias de 10 mmHg en la presión arterial sistólica, por encima de esto se debe descartar estenosis en arterias o enfermedad aterosclerótica en los miembros superiores. En cuanto a la tensión en el brazo derecho, se considera hipertensión.