La duración de la infección dependerá de la adecuada adherencia al tratamiento establecido, si se está drenando, seguir las recomendaciones del profesional que le atiende y continuar los antibióticos como fueron indicados. Esto debería mejorar en el transcurso de 10 días. Existen condiciones que pueden suponer la reaparición de abscesos, lo cual se intenta reducir al mínimo con un adecuado tratamiento.