La amilasa y la lipasa se utilizan para diagnosticar enfermedades como la Pancreatitis, que es una inflamación y en ocasiones, destrucción del páncreas cuando es muy severo; los valores que se refieren se encuentran en una zona gris, e incluso son muy bajos para considerar este diagnóstico, sin embargo, exámenes de control pueden ayudar a determinar si los niveles de estas enzimas están aumentando en sangre y hacer de forma temprana el diagnóstico de esta enfermedad.