Es difícil establecer qué cambios puede producir al bebé el exceso de hormonas. Generalmente estas hormonas no se transmiten al bebé pero no es posible saberlo a ciencia cierta. En todo caso, las hormonas no causan ningún daño o alteración morfológica ni ninguna malformación. El estado normal del bebé se puede evaluar por medio de ecografías. También se recomienda resolver todas estas preguntas con el ginecólogo tratante.