Es una maniobra para evaluar la estabilidad de la cadera y se aplica generalmente en recién nacidos, esta prueba permite determinar si la cadera regresa o no a su posición normal luego de luxarse. Esta maniobra consiste en:
- Poner al recién nacido boca arriba,
- Doblar las rodillas a 90 grados tomando todo el muslo con la mano y con el pulgar en la parte interna del muslo.
- Con la mano libre se estabiliza la pelvis del recién nacido, para lo cual hay que poner la mano sobre la pelvis haciendo fuerza ligera hacia atrás.
- Se moviliza la cadera hacia afuera acercandola a la superficie sobre la que está el recién nacido.
- Cuando la cadera está luxada este movimiento será limitado pero al presionar el fémur hacia atrás reduce la luxación pero al dejar de hacer presión regresa a la posición luxada, cuando esto sucede se puede sentir un sonido como un "click" cuando el fémur entra a su espacio normal en la cadera.