La infección por Clostridium difficile, es la causa más frecuente de las diarreas de origen hospitalario. Clostridium difficile es una bacteria perteneciente a los bacilos grampositivos. Son miembros de la flora humana normal, presente principalmente en el tubo digestivo y la vagina. Son ubicuos en el suelo. Ésta bacteria produce una toxina que se adhiere a receptores de la mucosa del colon y producen inflamación, destrucción de las células intestinales y diarrea. La diarrea coleriforme (de alto volumen) asociada a C. difficile es una complicación que ha ido en aumento, mayoritariamente asociada al uso de antibióticos. La manifestaciones clínicas de la infección por C. difficile son muy variadas y oscilan desde el estado de portador asintomático a la colitis inespecífica, la colitis seudomembranosa y la colitis fulminante. Las claves para el diagnóstico son: - Diarrea que surge tras 48 horas de hospitalización, aunque también puede tener origen comunitario. - Relación con el uso previo de antibióticos, pero no de forma exclusiva (no necesariamente con su uso simultáneo). - No existe evidencia inmediata de otras causas de diarrea.