Los hormigueos (parestesias) pueden ser secundarias a alteraciones nerviosas o vasculares. Es importante realizar un examen físico para determinar si hay signos de compresión de las raíces lumbares, o alteraciones en la musculatura como contracturas. Es importante que se fije si hay alteraciones en el color, temperatura, inflamación, lo cual nos puede decir si hay alguna alteración vascular en las extremidades inferiores.