El Zolpidem es un medicamento usado para el tratamiento del insomnio que debe ser recetado por un médico, quien determinará la dosis, la frecuencia y el tiempo en que debe ser tomado para disminuir la posibilidad de aparición de eventos adversos.
Los más frecuentes son: somnolencia, dolor de cabeza, mareos o incluso empeoramiento del insomnio, náuseas y vómito. Se pueden presentar pesadillas o alucinaciones y -con menos frecuencia- estado de confusión o irritabilidad.