Las "ojeras" de forma aislada no son un motivo de preocupación o un hallazgo de alguna enfermedad. Si se presentan en un niño sano, suelen ser un signo de atopia, es decir una predisposición a procesos alérgicos como: asma, dermatitis atópica, conjuntivitis alérgicas, rinitis y demás. Si el paciente presenta otros síntomas asociados requiere valoración por pediatría.