La frecuencia de las deposiciones en los recién nacidos varía y está determinada principalmente por el tipo de alimentación. La leche materna suele provocar deposiciones frecuentes, pero no es raro que algunos hagan deposición incluso cada 2 días. Los sucedáneos de la leche (leches de tarro) pueden provocar deposiciones menos frecuentes y más duras. Es de vital importancia que antes de haber salido del hospital el recién nacido haya sido valorado por el médico para descartar procesos de obstrucción intestinal. Si ya el recién nacido había hecho deposiciones previamente, puede ser que esté cursando por un estreñimiento, lo cual requiere valoración médica. Recuerde que los recién nacidos deben ser alimentados con leche materna exclusivamente hasta los 6 meses, a menos que esté contraindicado.