Las aftas bucales son un proceso infeccioso de epitelio en la boca y se pueden deber a virus y hongos -principalmente-. La transmisión se da por contacto de fluidos, a su vez que pueden transmitirse a otros órganos como los sexuales.
El tratamiento es principalmente sintomático con analgésicos para el control del dolor, en algunos casos con antifúngicos en crema, gel, enjuague bucal, comprimidos o pastillas.