La somatización de un embarazo empieza con una idea obsesiva, con un pensamiento obsesivo. Es decir algo que la persona hace en su mente y le da tal relevancia e importancia que no hace más que pensar en ello hasta el punto que se le vuelve compulsivo. Puede que lo haga involuntariamente que es lo más frecuente, pero para su mente es real, lo interpreta de esa manera así traten de demostrarle lo contrario de muchas formas. Por eso le decía hace varios días que ya se le convirtió en un síndrome obsesivo compulsivo que no la está dejando tranquila y se está convirtiendo en un problema adicional.
Debe empezar por convencerse así misma que no hay embarazo y validar con su médico si es necesario solicitar ayuda de medicamentos para controlar el pensamiento obsesivo.