La irritación cerebral frontal no un diagnóstico como tal, lo que quiere decir es que en esa área del cerebro se puede desencadenar actividad eléctrica neuronal anormal, lo cual puede provocar convulsiones. Inicialmente no afecta el comportamiento ni produce alteraciones cognitivas, sin embargo si hay episodios convulsivos y estos no se controlan sí puede generar secuelas.
Es necesario que esté en controles con el neurólogo para poder definir manejos adicionales y hacer un seguimiento adecuado.