El tratamiento depende de medicamento y dieta estricta, no solo por un mes o dos, sino que los hábitos deben cambiar de por vida. Se deben mantener horarios establecidos de alimentación, evitar grasas, salsas, ácidos, café, alcohol, cigarrillo y disminuir el estrés. Consultar al médico tratante para que se establezca el tratamiento preciso.